dopamina y hábitos en Parkinson

Dopamina y hábitos: por qué cuesta mantener la rutina de ejercicio en Parkinson

Muchas veces escuchamos que “para crear un hábito hace falta fuerza de voluntad”. Pero la realidad es que, detrás de cualquier hábito -como salir a caminar cada día, acudir a las sesiones de fisioterapia o hacer los ejercicios en casa-, hay un complejo sistema cerebral que se encarga de que una acción repetida se convierta poco a poco en algo automático. Uno de los protagonistas principales de este sistema cerebral es la dopamina. Hablamos en esta entrada de dopamina y hábitos en Parkinson.

¿Qué es la dopamina y cómo influye en los hábitos?

La dopamina es una sustancia que utilizan las neuronas para comunicarse. Entre otras funciones, está implicada en el movimiento, la motivación, la sensación de recompensa y el aprendizaje.

Cuando hacemos una actividad que nos resulta agradable, positiva (bailar, pasear o hacer ejercicio), el cerebro libera neurotransmisores, entre ellos la dopamina. Esta liberación no solo nos hace sentir bien, sino que refuerza las conexiones cerebrales que hace que queramos repetir esa actividad. Con el tiempo, la acción se va automatizando y de ahí, nace el hábito. Por eso, cuando empezamos a hacer ejercicio de forma regular, al principio puede costar un poco, pero con la práctica nuestro cerebro “aprende” que esa rutina, nos hace sentir bien, y la pide de forma natural, libera la dopamina antes incluso de que hagamos el ejercicio, solo con pensar en lo bien que nos sentimos antes.

El ejercicio físico es uno de los estímulos más potentes para el sistema dopaminérgico. Diversos estudios han demostrado que hacer ejercicio de forma regular aumenta la liberación de dopamina y mejora la plasticidad cerebral, es decir su capacidad de adaptarse y aprender. Este efecto explica por qué muchas personas sienten bienestar y motivación después de realizar actividad física. No es solo “psicológico”: es un fenómeno biológico real.

Parkinson y dopamina

En la Enfermedad de Parkinson, las neuronas que producen dopamina se van perdiendo de manera progresiva. Esta falta de dopamina no solo afecta al control del movimiento sino también a la forma en la que el cerebro refuerza y consolida nuevos hábitos. Esto significa que, aunque una persona con Parkinson quiera hacer ejercicio y sepa que le beneficia, su cerebro puede tener más dificultades para “grabar” esa rutina. No es falta de ganas ni de motivación personal: es una consecuencia directa de la enfermedad.

¿Qué podemos hacer?

De igual forma que utilizamos “estrategias motoras” para salir de un bloqueo o iniciar el movimiento, existen estrategias para facilitar la creación y el mantenimiento de hábitos saludables y necesarios, como es el ejercicio físico, incluso cuando la dopamina está disminuida:

  • Rutinas fijas: realizar actividad siempre a la misma hora y en los mismos días.
  • Señales externas: por ejemplo, dejar preparada la ropa de ejercicio, usar recordatorios o asociar la actividad a otra rutina.
  • Hacerlo en grupo: compartir la actividad con otras personas ayuda a mantener la constancia y aporta motivación social.
  • Reforzar pequeños logros: celebrar cada avance, por pequeño que sea, activa otros circuitos de recompensa.
  • Aprovechar los “momentos ON”: programa la actividad física en los momentos en los que la medicación está funcionando mejor.
  • Progresión gradual: empezar poco a poco e ir aumentando progresivamente para que el cuerpo y el cerebro puedan consolidar cada paso.

La dopamina es una pieza clave para que los hábitos se consoliden. En el Parkinson, su disminución puede hacer que mantener rutinas como el ejercicio físico sea más difícil. Comprender este mecanismo nos ayuda a ser más compresivos y realistas: no se trata de falta de fuerza de voluntad, sino de adaptar las estrategias para que el cerebro pueda “aprender” a su ritmo.

Y, sobre todo, recordar que el ejercicio es una herramienta fundamenta para mejorar movilidad, equilibrio, ánimo y calidad de vida. Con el acompañamiento adecuado, ¡sí se pueden crear hábitos saludables duraderos.

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